Tras una elecciones únicas en España desde que volvimos a la democracia 4 partidos son los más votados obligando a dialogar, aunque claro, los nuevos partidos Ciudadanos y Podemos son los que tienen la llave. Antes de las elecciones se daba a los dos nuevos partidos como primera y segunda fuerza política, algo muy lejos de la realidad, Podemos acabó tercero en votos muy cerca de PSOE y Ciudadanos muy lejos de las expectativas, siendo cuarta fuerza política muy lejos de los tres primeros.
Quiero destacar los resultados tanto del PP como del PSOE obteniendo muy malos resultados. El PP de pasar de una mayoría absoluta a ser el partido más votado sin mayoría y teniendo que hablar con dos partidos para gobernar. Por otro lado está el PSOE, los peores resultados de su historia, algo que tuvo que tener algunas consecuencias en cuanto a renuncias, empezando por Pedro Sánchez. Aunque más adelante hablaré de esta persona.
Después de que el PP, con Mariano Rajoy a su cabeza, intentase formar gobierno con solo el apoyo de Ciudadanos (sin llegar al número necesario para gobernar) y con un PSOE en la negativa de la investidura de Mariano Rajoy como presidente del Gobierno. Tras intentar lograr el pacto para gobernar el PP desiste del intento y deja que otro partido intente gobernar con apoyos, cosa que quiere hacer el PSOE, por el momento con el apoyo de Ciudadanos (sí, otra vez Ciudadanos, le gusta la carne y el pescado al parecer). Hoy en el discurso de investidura Pedro Sánchez le ha hecho ojitos al PP (después de que se negase a que ellos gobernasen) para que le apoyen para gobernar.
Lo más dicho en el discurso de investidura es el diálogo y la nueva política, aparte de prometer muchas cosas y diciendo las fechas en las que estarían listas las leyes, aunque no sé si me he perdido algo de lo que ha dicho pero no oí nada de la reforma electoral, en donde yo quiero que 1 voto sea 1 voto y no por ser de determinado partido 1 voto es 1000 para otro partido.
Todo apunta a que en junio habrá nuevas elecciones y te preguntarás que pienso de todo esto, como veo el panorama actual de la política.
He dejado claro a lo largo del blog que mi pensamiento político es totalmente de izquierda, sin embargo, debo reconocer que hasta dos días antes de las elecciones mi voto iba a ser de Ciudadanos ya que era quien tenía un sistema para desbloquear gran parte de la situación actual de España. También admito que me engañó con lo que decía en las entrevistas que nunca pactaría para que gobernase ni PP ni PSOE, lo que no ha cumplido, desde el primer día lanzó su apoyo al PP rompiendo la promesa a sus votantes.
Yo voté a Podemos, sin convencerme de mi elección ya que hay cosas éticas que van en mi contra, como el apoyo al gobierno de Venezuela, algo que es imperdonable. Estas elecciones han sido de difícil elección ya que podría significar el gran cambio, la limpieza de la política, muchas propuestas y las nuevas caras que tanto prometían un gran cambio en la forma de ejercer la política como eran Pedro Sánchez, Albert Rivera y Pablo Iglesias. Del primero ya se pueden hacer una idea de que cariño no le tengo, Pedro Sánchez no me gusta como presidente porque no se le ve capacitado para ser presidente del Gobierno, debido a que ni es capaz de convencer en su partido, dado que hay barones que le han hecho el gran vacío, como Susana Díaz (que si el PSOE en las elecciones de junio no consigue buen resultado la veremos de secretaria del PSOE).
Después tenemos a Albert Rivera que lo que transmite es que quiere estar en el gobierno sea como sea y lo que ha prometido se lo llevó el viento, es verdad que es la llave para que puedan gobernar y que se debe pasar por sus propuestas y llevarlas a cabo pero no es nada revolucionario como prometía en la campaña.
Por último, tenemos a Pablo Iglesias que han marcado la línea roja para que obtengan su apoyo, el referéndum en Cataluña, cosa que ningún partido quiere hacer. Podemos está siendo duramente criticado por su posición firme, pero es el único que permanece fiel a lo prometido. El pueblo catalán merece ser escuchado, nadie obliga a los partidos que si el referéndum es favorable a la independencia dársela, se puede intentar dialogar y llegar a un acuerdo y si no llega el acuerdo pues ya se puede gestionar la independencia.
Dicho lo cual no veo a ningún candidato como posible presidente del Gobierno. Ninguno da la talla a gobernar, Mariano Rajoy el cobarde, Pedro Sánchez el solitario, Albert Rivera el chaquetero y Pablo Iglesias el anarquista. Vaya elenco.
En mi opinión, el trato de la independencia es la clave para el obtener el futuro gobierno dado el "triunfo" de los partidos independentistas. Aquel partido que hable con el pueblo catalán y haga el referéndum triunfará en esta batalla por presidir este país corrupto y sin fe política.